Como dije, actualizaré de vez en cuando. La opción de programar entradas me ayuda bastante, puedo escribir mucho en un momento de inspiración y luego no tener nada nuevo en mucho tiempo, por lo que cuando sea el momento de inspiración dejaré las entradas programadas.
Aquí os traigo una de esas entradas programadas.
- ¿Esto es todo lo que puedes hacer? Defraudas mis expectativas, princesa.
La lanza de Reik le dificultaba el combate a Aelithia.
Ella intentaba acercarse para atacar con las espadas pero Reik atacaba con su lanza antes de que lo tuviera en su rango de ataque. Si ella atacaba con las espadas que invocaba, él las detenía con viento. Si utilizaba fuego, él lo detenía con agua. Lo único que quedaba era el ataque físico.
- ¿Qué expectativas tenías? Me parece que hay demasiados rumores circulando. – Dijo mientras saltaba para intentar acercarse a Reik desde arriba.
- Sí, hay muchos. Pero los que me interesan son los que dicen que eres la hechicera más poderosa de Atharan y los que hablan sobre tu gran habilidad de combate. – Respondió mientras giraba sobre sí mismo y golpeaba a Aelithia con la lanza, haciendo que saliera volando y se golpeara contra un árbol.
- ¿Quién se supone que cuenta eso? Llevo diez años en este lugar y nadie me ha reconocido y mucho menos ha visto mis habilidades. – Dijo mientras se levantaba.
- Buena pregunta. - Respondió el mercenario. – Pero si con siete años hiciste correr esos rumores no debes ser mala en la magia.
- No soy mala, pero tampoco diría que soy la mejor, me falta mucho por aprender.
Una luz brillante apareció en la espalda de Aelithia curando sus heridas.
- ¿Ya vas a ponerte seria? – Preguntó Reik al ver la sonrisa que se dibujaba en la cara de Aelithia.
- Durante todo este tiempo solo he luchado contra Lie así que no tengo nada de experiencia en combates reales, perdona si te he hecho esperar. – Respondió mientras hacía desaparecer todas las espadas que había invocado.
Aelithia se preparó y comenzó a correr directamente hacia Reik. Llevaba diez años viviendo en el bosque y sabía perfectamente cómo esquivar todos los obstáculos del suelo para evitar tropezar.
Reik vio cómo la chica se acercaba rápidamente hacia él, apuntó hacia Aelithia con la lanza y atacó. La chica iba demasiado rápido como para poder esquivarlo completamente.
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